El equipo tricolor se impuso a la «verdeamarela» por la mínima en suelo venezolano.
¡Partidazo! Esta palabra resume el encuentro entre colombianos y brasileños, donde los dirigidos por César Torres firmaron su clasificación al hexagonal final, con el bonus de terminar como líderes absolutos del grupo B, por encima de Argentina, Brasil, Ecuador y Bolivia.
Desde un inicio, Colombia mantuvo una ideología ofensiva, luchando cada balón e intentando generar peligro en el arco del guardameta Longo. Cabe resaltar que el once inicial contó con una nómina alterna, dándole descanso a varias piezas importantes del esquema del técnico Torres.
La primera parte estuvo llena de emociones para ambos equipos, con Colombia creando opciones de gol a partir de la colectividad, mientras que Brasil tuvo que recurrir al juego individual por bandas, como consecuencia de la solidez defensiva del equipo cafetero. Sin embargo, el primer tiempo cerró de esta forma, con solo promesas.
Sobre la segunda mitad, Colombia saldría de nuevo con un juego agresivo, aumentando la presión y asfixiando a la «canarinha». Dicha fórmula sería efectiva, puesto que, sobre el minuto 47, una recuperación por anda derecha de Jordan Barrera dejaría el balón para Neyser Villareal, quien cruzó el remate, convirtiendo el primer tanto para Colombia.
Brasil intentó despertar, abusando de la individualidad por bandas, jugadas que no lograban generar riesgo en el arco de Alexei Rojas. Aún así, cuando el partido parecía resuelto, un remate de Allison sobre el guardameta colombiano paralizó a todos los asistentes, puesto que, tuvo que aparecer Yeimar Mosquera para salvar el esférico sobre la línea.
Tras 90 minutos de fútbol, el juez Mathias de Armas decretó el final del compromiso. Con este resultado, Colombia se afianzó como líder del grupo B, a la espera del hexagonal final y con el sueño mundialista intacto.
