Un Cali triste, sin fútbol y sin herramientas empató con nueve jugadores ante Melgar, equipo dirigido por Néstor Lorenzo.
Deportivo Cali buscaba afrontar el partido ante Melgar para olvidarse del desastre del semestre anterior, finalizando penúltimo en el campeonato y eliminado en primera ronda ante Fortaleza. Para sorpresa de todos, en el primer tiempo Melgar fue mucho más dominante que el Deportivo Cali en su propio predio, asfixiando a los caleños con una presión instante y logrando explotar las bandas del Cali. Gracias a la mala definición de los peruanos y a un buen comportamiento de Mera en la saga, el partido se fue a ceros en el entretiempo.
En la segunda mitad, el Deportivo Cali reaccionó ante el ingreso de Camargo en la mitad de la cancha y logró dominar a los peruanos durante algunos minutos, pero los remates de Velasco, Mafla y Mina fueron atajados por el portero Cáceda. Lamentablemente para los de Dudamel, Carlos Lucumí ingresó para hacerse expulsar con una fuerte e inocente patada buscando ganar el salto ante Galeano, y tan solo 2 minutos después, una agresión de Luna dejó al Cali con 9 hombres.
Al final, los caleños se dedicaron a aguantar y se encontraron con un De Amores muy sólido que impidió que las aproximaciones de Melgar representaran más peligro, además de atajar un cabezazo que presuntamente era en fuera de lugar. El próximo miércoles será el duelo de vuelta, pero lo que está claro es que si el Deportivo Cali no refuerza sus líneas, su presentación con tan corta nómina puede ser igual o peor que en 2022-1.
Que equipito, no dan ni lástima