Un 1 de octubre de 2005, el clásico 245 del fútbol bogotano se jugaba a puerta cerrada tras haber sido manchado por la violencia.
El juego entre Millonarios vs Quindío dos semana antes del clásico capitalino inhabilitó las emociones de un partido vibrante entre Millonarios y Santa Fe. Los hinchas embajadores dejaron un no muy grato recuerdo en el encuentro ante los cuyabros tras varios actos vandálicos ante la hinchada quindiana, perjudicando el espectáculo de aquel encuentro y de los venideros tras la sanción.
El técnico de Millonarios era Fernando «El Pecoso» Castro, el cual aceptó, junto con el presidente, Juan Carlos López, la sanción que generó significantes pérdidas dentro y fuera del terreno de juego.
Las tribunas fantasmales y desoladoras del Campín colgaban pancartas blancas que adornaban las zonas Norte y Oriental del Estadio, las cuales decían: «Clásico irrepetible: 35 mil hinchas en fuera de lugar» y » Fuera de Lugar» en la otra tribuna.
Al estadios asistieron 400 personas, las cuales 250 eran parte de los medios de comunicación, 15 miembros administrativos de Millonarios, miembros de primeros auxilios, personal logístico del estadio, miembros de la Dimayor, cuerpo arbitral, jugadores. Sin embargo, el panorama afuera del Estadio era aterrador, 700 miembros de la Policía, atentos a cualquier disturbio que se pudiera presentar alrededor del Campín tras la imposibilidad de ingresar a las tribunas.
En la tranmisión emitida por Futbolmanía RCN, se escuchaban las charlas de los jugadores, de los técnicos, los gritos tras las faltas recibidas, los regaños, pero no se escuchaba el cántico en las tribunas. Aquel día, el único botín que se llevó Millonarios fue haber roto el invicto de 450 minutos sin recibir gol de Luis «Neco» Martínez, pues las otras 2 alegrías que pudo llevarse se vieron opacadas por el penal errado de Gabriel Fernández y por la contundencia ofensiva de Independiente Santa Fe, el cual se llevó el partido con un 3-1 tras el pitazo final.
Los goles del partido fueron anotados por Luis Yanes, Jairo Suárez y Nelson Oliveira por el cuadro cardenal. Millonarios descontó en el marcador con un gol de Harry Castillo.
Las pérdidas en materia económica fueron alrededor de 300 millones de pesos.